En los últimos días, los medios de comunicación han publicado un sinfín de noticias y artículos sobre el racismo en la marca española Conguitos o con los comentarios racistas que se publican en determinadas redes sociales. El mundo se encuentra inmerso en un gran cambio y la mayoría de los expertos piensan que las empresas que se adapten al nuevo ecosistema social, podrán sobrevivir. Las que se resistan a revisar estos conceptos languidecerán o estarán condenadas a cerrar. Lo analizamos en nuestro Blog.

En la publicación El origen de las especies, Darwin afirmo que “las especies que sobreviven no son las más fuertes ni las más inteligentes, sino aquellas que se adaptan mejor al cambio”. Ese razonamiento es el que utilizan muchos de los expertos que, durante estos días, opinan en medios sobre los acontecimientos de racismo sobre los famosos Conguitos. Toda la polémica surge debido a la campaña ciudadana que ha nacido tras las denuncias del movimiento internacional Black Live Matter, dentro de la comunidad afroestadounidense por el caso Trayvon Martin y que ahora se ha vuelto a activar por la muerte de George Floyd.

La campaña ciudadana, lanzada a través de la plataforma Change.org, denuncia el racismo de la marca Conguitos y su legendaria mascota. La reivindicación, que ya cuenta con 1.000 firmas en una semana, ha revolucionado las redes sociales y ha elevado el debate a nivel nacional. El foco de la denuncia se pone sobre el nombre y el dibujo de la marca, puesto que contiene un color de piel asociado al chocolate y unos labios rojos totalmente desproporcionados. La firma ha señalado que no tiene pensado cambiar la identidad corporativa e insisten en el carácter simpático de su mascota. Incluso, en su comunicado, ha dejado claro que los “Conguitos de chocolate blanco están representados por una mascota de color blanco”.

Al otro lado de ese pensamiento se encuentra Cola-Cao. Hace pocos meses, la empresa retiraba la canción del negrito para presentar una nueva letra sin racismo y Nestlé pretende renovar El Beso de Negra, un dulce con mucho éxito en Colombia. Igualmente, Pepsi ha anunciado que reconvertirá su marca Aunt Jemima, cuyo logo tiene reminiscencias coloniales. En estos tiempos resulta imposible entender anuncios que triunfaron en el pasado. Por ejemplo, basta recordar el anuncio del negro meneíto de Frigo donde se anunciaba un helado o las referencias del flan chino Mandarín.

Los expertos indican que las marcas deben hacer algo al respecto, pues si tomas una postura neutral en situaciones de injusticia, al final estás eligiendo el lado injusto del tema. Por eso, ante una situación de crisis, lo peor que puede hacer una marca es no hacer nada o reafirmarse en lo ya hecho. Los profesionales abogan por coger el toro por los cuernos, admitir que algo se ha venido haciendo mal, corregir la situación y activar una campaña para poder mostrar a los clientes y usuarios que se ha cambiado.

La crisis de Facebook

Día a día crece la lista de compañías que han anunciado su intención de anunciarse en Facebook e Instagram por el boicot iniciado por distintas multinacionales al considerar que una cultura del odio se ha apoderado del debate de estas redes sociales. Coca-Cola, Honda, Unilever, Starbucks, Ford, Adidas, Hp son algunas de las grandes compañías que no podrán un anuncio más y que se han sumado a la campaña #StopHateForProfit (Paremos los beneficios por odio), que busca promover el boicot a Facebook y sus empresas, hasta que no se implique más en la moderación de contenidos y elimine los mensajes que incitan al odio o difunden informaciones falsas en sus plataformas.

A este boicot de grandes firmas se han unido varias organizaciones de defensa de los derechos civiles en Estados Unidos, en parte motivado por el inmenso debate en el que se encuentra sumido el país norteamericano tras la muerte del afroamericano George Floyd. Por el momento, Mark Zuckerberg ha salido ante los medios a anunciar que Facebook ya no permitirá publicitarse en sus plataformas a entidades que promuevan campañas de odio. Pero lejos de apaciguar los ánimos, estas declaraciones no han servido para conseguir frenar la sangría de ingresos publicitarios.

Facebook se ha enfrentado a muchas crisis pero la actual es muy importante, ya que la compañía de Zuckerberg obtiene el 98% de sus 70.000 millones de dólares de ingresos anuales de la publicidad. El precio de las acciones de Facebook ha caído más de 8% después del anuncio de la empresa Unilever, lo que muestra claramente las consecuencias de la crisis para la red social más usada del mundo.

Si por algo se ha distinguido Mark Zuckerberg ha sido por reconocer errores y estar siempre dispuesto a hacer cambios y aprender de los traspiés para revertir la situación de crisis en la que se ha encontrado desde sus inicios. En la actual situación, está haciendo lo mismo. El pasado viernes, Facebook dijo que iba a comenzar a etiquetar las publicaciones que puedan violar sus políticas, además de incluir un enlace a su centro de información en cualquier publicación, incluidas las de los políticos.

Pero los responsables de la campaña #StopHateForProfit no se conforman y están dispuestos a llegar más lejos, pues señalan que Facebook “ya ha actuado anteriormente implementando escasas medidas después de cada crisis, para después seguir operando de la misma maneras”. De hecho, los organizadores se han centrado hasta el momento en la publicidad en Estados Unidos, pero han anunciado que están listos para trasladar la campaña al resto del mundo. Habrá que estar atentos a  ver cómo termina esta situación que afecta al gigante americano de las redes sociales.